martes, 16 de febrero de 2010

. Can anybody find their home? .

Después de un par de días de locuras varias, ahora mismo, siendo un martes, logré encontrar un momento de relax. Estoy en medio de una experiencia básicamente nueva: compruebo si soy apta para vivir sola o, si en su defecto, soy una completa inepta que muere si no tiene a su madre al lado.
Mis tíos y primas decidieron irse de vacaciones. Tienen un departamento en Caballito que llega casi casi a mi concepto de casaidealenmediodelaciudad. Claro que también tengo un concepto de casademissueños, pero ese es otro tema. La cuestión es, porque ya me estoy yendo por las ramas, que me estoy quedando un par de días en este agradable departamento con la excusa de que alguien tiene que darle de comer a la gata.
No hay nada mejor que salir del trabajo y no tardar más de cuarenta minutos (como máximo!) en llegar a casa. No hay nada como esquivar los desastres de Constitución. No hay nada como esa especie de sensación de libertad que te da Capital, que no te da, por ejemplo, mi suburbio mierdoso de Monte Grande =D. Se respira otro aire (si bien más contaminado por la cantidad de vehículos que circulan en una gran ciudad, pero ese tampoco es el punto) y la verdad es que es un break bastante agradable de las cuatro horas que desperdicio al día para ir de casa al trabajo y del trabajo a casa y convengamos que un poco de soledad, un poco de independencia dentro de los quilombos cotidianos no viene nada mal.
Eso sí, esperemos que la calma dure un poco más.